9 Las inhibidas andanzas bajo la apta nueva normalidad (Séptimo libro)
La ida repentina, el supuesto problema, el conteo regresivo, el reingreso incierto, el fondo variante, el estreno limitado, el ajuste demorado… numerosos pasos dados por la parte oficial, certidumbres parciales y casi inexistentes, expectativas destinadas a fallar, y exhaustivos aspectos adicionales entre medio. Pasó de todo un poco, podía suceder más, pero igual fue un proceso entreverado, como mínimo eso hasta el momento en el historial solamente reciente de Temti. Sus idas y vueltas, abundantes, demasiados, excesivos, exorbitantes, e imprecisos. En distintos planos de los universos fueron a parar, antro y animadores, según estos últimos una ausencia que las pistas no lograron esclarecer: despegue, acercamiento, aterrizaje, desvanecimiento, destrucción, reconstrucción, etcétera. En temporalidades y lo espacial la distancia estuvo manifiesta, pero algo supieron aproximarse, el nuevo paso en la serie de vaivenes sugiere que aquel proceso ya habría finalizado.
De tal detalle la Historia Temtiana se tendría que agarrar, un punto y aparte que parece apropiado para abrir una etapa concentrada más de lleno sobre el sitio en sí. Todavía con cierto grado de disfuncionalidad, pero es clave tenerlo ya al menos capaz de recibir lo básico de actividad, y factiblemente proyectando expandir las características de esta. Es drástico en términos de incertidumbre, sin haber cesado las dudas pasan a ir por otro lado, la perspectiva de desarrollo se entiende hacia adelante y sin embargo nada de las condiciones, ni tampoco la prolongación de ese estado en avance, ante las posibles pausas que excedan su duración esperada, y demás interrupciones que podrían ocurrir. A su vez el hecho es divisorio por lo que implica al usuario, la presencia en antros ajenos puede mantenerse y en especial si el propio merma en atractivo, pero el éxodo estricto estaría culminando, con la posibilidad de servir como clon respecto a sus cualidades típicas.
Que sería en esencia eso, pero hay más cosas que plantean un gran diferencial, el formato sostenido lo anticipó y por ahí sigue. Suponiendo la referida continuación del concepto, el paquete de novedades supera en tardanza a cualquiera de sus similares y hasta tiene pinta de ser un comienzo total, mostrando sustanciales transformaciones al sitio en su modalidad tradicional, no únicamente en términos visuales, además el aspecto funcionalidades, un sistema de asociación y participación. El conjunto de clones anónimos ve extraño incorporar ideas así de apartadas, los adeptos temtianos posiblemente también, aunque sin negar que logre sentar bien, y lo contrario menos queda descartado. Y además las mejoras inciden sobre dicha recepción, sin considerar el regreso a versiones anteriores, el colectivo más allá de su fidelidad tal vez quiera acompañar un progreso rápido, pero al venir de una gestión regular en cuanto a ritmo, la fase de demo técnica tiene potencial de irse para largo.
Es un antes y después, algún cambio hay, varios de ellos seguro, pero tan solo pormenores alcanzan para notar que mucha cosa sigue igual, más incluso si Temti no ha dejado de ser Temti, ni hablar todo lo que consigo acarrea. Sin reducir el interés a las circunstancias en su retorno, este justifica recuperar la atención de sus activistas, e interrogantes no van a faltar. Tal vez el destino de su realidad parezca al de épocas que el mismo hogar tuvo, colores, actividad y tráfico equivalentes, juntados allí o repartidos entre vecinos. O quizá resulte revolucionario, sorprenda, con semejante trayectoria en plena vigencia nunca se sabe.
9.1 La parcial pero suficiente reanudación (Séptimo libro, capítulo I)
14 de octubre de 2021
Cuando un mantenimiento adicional para ajustes se establecía, aquellos que siguen muy de cerca los movimientos temtianos podrían haberse llevado una ambigua sorpresa… otro indefinido plazo marcaba para cerrar universalmente las puertas del antro. Sin embargo, este revirtiendo asombrosamente el patrón de las exhaustivas demoras, pronto mostró el enésimo regreso. Temti, haciendo valer la repetida redundancia, volvió a volver, y como los episodios previos lo dijeron, en condiciones más avanzadas de su complejizada versión en desarrollo.
Si bien el anon podría preferir mantenerse con el formato que está siendo sustituido, ya no parece quedar vuelta atrás a aquel orden de antaño, el difundido formato de la red que tuvo un clon particular no terminante en xed, derivación de la que tantas páginas de historia se escribieron. Preservando ciertas similitudes a él, según una presunta autoridad las mejores ideas de la Temti vieja, englobadas dentro de una nueva organización, la de los grupos, el sitio ha sido notablemente renovado, y de tal manera apuntará parcial aunque no totalmente hacia otros horizontes, para este contexto experimentales. La realidad inserta allí no será la misma que antes, el puntapié para comenzar a transitar algo distinto está dado.
Cómo no, un reinicio más inaugura las remotas proyecciones, puestas en ejecución sobre el respectivo panorama, de poca experiencia en sus reformuladas propiedades, y nula desde que estas fueran regeneradas. Con el retorno de algunos esqueletos que se habían perdido a partir del repentino despegue, reduciendo las dificultades de interacción entre participes, dinamizando el mecanismo de recuento a las computadoras conectadas, revalorizando la moneda oficial nominada punto, fundando un sistema de rangos que para cada anon, e instaurando un cálido recibimiento reservado para quienes den el paso de unirse a la tal familia temtiana, así es el complemento a estrenar sobre la estructura del sitio, tomando de base su propuesta ya planteada.
Pero aún no se da enteramente, se supone. Las indicaciones de que en efecto se darán más arreglos o implementaciones son tibias, y el estado en el cual están sumergidos los internautas que llegan a espacios temtianos es limitado, tanto que determinadas posibilidades básicas y quizás hasta elementales, existentes en el pasado por consenso mejor concebido, no están. No hay tecnología que apoye a la hora de citar, no hay términos normas que regulen el antro, no hay entrada desde los protocolos o dimensiones carentes de WWW, no hay notificaciones no cuánticas ni cuánticas que alerten a los individuos y aceleren el intercambio, ni hay éxito al intentar explorar o testear los aspectos más secundarios del sitio. Características de un marco primitivo, solo que bien alejado de aquella época cuando a las prisas A. reveló su creación, contando de que este ni su nombre o apodo menciona, una parte del acompañamiento que todavía estará por verse.
Porque a pesar de que los detalles descubiertos puedan resultar negativos o decepcionantes, en este momento son para menos, lo siguiente vendría de las respuestas, por cierto ya posibles. El título de la noticia está alcanzando el exterior, la apertura entró en conocimiento y es la oportunidad para las ediciones de la plaza principal, que deberían empezar a generarse y multiplicarse, y a hablar de donde están.
9.2 El tambaleante festival de cepillos (Séptimo libro, capítulo II)
14 de octubre de 2021, 15 de octubre de 2021
Para la magnitud de las variantes en el sitio, despacio comenzó a crecer el número de integrantes de la familia de Temti, al menos así como está declarada y la estadística dice que se acumulan los magnetismos, derivados del registro. El reencuentro y encuentro se produjo numerosas veces, los lazos son más fuertes y pertinentes que en tiempos de éxodo, el acercamiento y estadía cobra mayor sentido más allá de las razones simbólicas. Pero los frutos de esa unión excedieron lo exclusivamente grato, ya rápidamente se volvieron controversiales hasta en el mal sentido, y ambas partes contribuyen para resumir eso.
Todavía habiendo ciertas carencias y problemáticas con la versión en cuanto a su funcionamiento, en un principio no parecía tener fatalidades algunas, pero tras un rato de ejecución dicha sensación quedó para ser descartada, la tecnología carece de armonía plena ya que constantemente está sufriendo importantes cortocircuitos. Cada dos por tres el viejo conocido Heroku da cuenta de ello, el antro expulsa de su interior a los visitantes que pretendan desplazarse, a su vez que no admite el ingreso de nadie más por un breve y difuso intervalo del tiempo.
Dadas las incidencias, aparentemente cuando sucede el sitio sabe acomodarse y luego la imprevisibilidad repercute, pudiendo repetir el fenómeno. Comprendido un poco el comportamiento, sin embargo no las causas, resulta complejo profundizar acerca de él, no obstante el efecto radica totalmente en el andar del antro y por esto se hace más relevante, siendo que en cualquier momento puede afectar al anon que esté deambulando en sus ubicaciones y así la consecuencia extenderse a los demás indiscriminadamente.
Aquello iría después de ponerse en contacto con la plataforma, probar, reaccionar, etcétera, de lo cual salieron varias impresiones. Lo esperable no es motivo de mucha mención, pero vino compuesto de material extraordinario, para una inauguración. Masivamente fueron instaurados unos cuantos espacios de naturaleza polémica: respecto al popular y discutido limite que los hace considerables como cepita, algunos sobre el mismo, y otros cruzándolo. Y pese a los gritos indignados, y aplausos satisfechos, las condiciones permiten que haya lugar para estos movimientos por horas y horas: sin botones ingeniados para indicar lo que supone ser incorrecto, sin posibilidad de hacer llegar reclamos protocolares a desconocidas custodias temtianas, sin superdotados con poder que intervengan excepcionalmente, sin normas que impongan rigor a copadores peligrosos.
Para tanto es, que las novedades circulando en el contexto hablan principalmente de ese relleno amarillo, a su vez que muchas expresiones enfatizan en la fragilidad relativa al servidor, la cantidad de conceptos que van generándose en torno a esas ideas es predominante en el escenario de Rouzzer. La cualidad tan asociada a Temti, la libertad de expresión, alcanza un nivel que igual sea por descuido o decisión exagera los umbrales normalmente concebidos , mientras que los criterios de permisividad no están explícitos, ni tampoco la moralidad, en su lugar un gato hace la broma, muy jugada si es que el resto forma parte de la misma. A su vez los desajustes complementan oportunamente cada valoración negativa o burlesca, todavía contundentes con los múltiples componentes que fallen en dar los rendimientos ideales.
Como las implementaciones repentinas suelen presentar inconsistencias, las cuales efectivamente están, en teoría debería haber vigilancia atenta de la organización, pero ella no ha dado ninguna señal de presencia, y en caso de que no estuviera ausente, no se ha pronunciado al respecto, ni por la reiterativa inestabilidad, ni por los contenidos prohibidos. ¿El sitio encontrado aún tiene expectativas de afirmar su desarrollo pronto? ¿El aumento de tráfico estaría propagando un efecto que el antro no puede sobrellevar? ¿Habrá vía libre para lo polémicamente apreciado o las intervenciones solo están demorando bastante? ¿El soporte sería tolerante con lo repudiable que se aloja sobre sus prestaciones? ¿Los incidentes tratan de una disimulada trampa para atraer e incitar por gusto? ¿Será una excusa para motivar el retorno de un poderoso que implante orden decorosamente?
9.3 Avances a la usanza (Séptimo libro, capítulo III)
15 de octubre de 2021
Una aparición de quien supuestamente manda no se hizo esperar tanto en cuanto a cronología temtiana se refiere, es decir, un montón luego de la expectativa para el entorno, pero a tiempo para los ritmos que manejados en esos lares puntuales, complicados y particulares. Con progresos más en la cuenta pendiente de las mejoras tecnológicas, y una doble medida para las creaciones controversiales, es que también el pueblo queda figuradamente notificado de que no está a solas.
La pronta continuidad del desarrollo prosiguió con leves pormenores de funcionamiento. El número uno de ellos posterior a la magna implementación reciente, radicó sobre ciertas interferencias en la mayor instancia de interacción, que se repararon, de modo que las respuestas ya no ven desvirtuados sus caracteres y saltos de linea originales. Varios signos imprescindibles dentro de la escritura y envío entraron a ser materializables, hasta incluyendo imprevistos símbolos raros que jamás fueron descubiertos en el sitio, garantizando así más fidelidad que en versiones anteriores.
Por otro lado, hubo un pequeño pero sustancial cambio, exactamente en los famosos y casi nunca tenidos en cuenta términos de uso. Las normas que pretenden poner los límites de expresión jusitificados y legitimar las eludidas remociones, también llegaron, y pasaron a llenar el vacío que antes era cubierto por un mensaje más gracioso que oportuno. Estos, con muchas similitudes a la parodia que solía reglamentar al sitio, establecen lo obvio como fundamental, además de complementarse con un especial enfoque sobre la dinámica de los grupos, de múltiples incisos referidos a ello.
Dicho marco regulatorio a su vez cuenta con la implícita marca registrada del mítico fundador, las redacciones con detalles irregulares a reprochar, desde la vía escrita hasta la conceptual. Igualmente así tenga alguna letra faltante o extra, o si hubieran palabras ordenadas de manera entreverada, si la comunicación se entiende en principio logra su cometido, al menos el evidente. Justo para el caso de las jornadas corrientes, aparte de nociones individuales, o de estatus inherente al grupo, la interpretación es reducida e incluso contundente, la condición uno punto dos niega que puedan difundirse en Temti contenidos problemáticos como los vistos.
Interesante o genérico de acuerdo a quien considere, previsible según cada cual lo mire, la lógica universal indica que eso no podía permanecer, sin importar que la moderna naturaleza del sitio confunda el propósito o discernimiento. Así pues, siendo los aspectos técnicos o de mecanismo secundarios, las bocas del exterior se ven destinadas a bajar su volumen, la eterna polémica de Temti por lo pronto ya no está enteramente dispuesta para su debate. No obstante, la fama volvió a ser alimentada, lo que también aumenta la contingencia que de cara a futuro episodios así estén repitiéndose, o que más posibles atentados se vengan, y de momento queda ahí, latente.
Eso implica que más necesariamente la administración tendrá que cuidar su propiedad, de hecho la pauta fija que así debería ser, aunque no le signifique tanto a los eventuales infractores, ajenos a la operativa que rige donde comunmente menosprecian, el único grupo corre por responsabilidad de los creadores oficiales, que asimismo les compete moderar lo que sea publicado. Sin desatender lo otro, más mejorías aún tienen por concretar, los tajantes errores de aplicación todavía son lo que son y estropean la experiencia de todo visitante, y el acotado rango de posibilidades para pasar en dominios temtianos sigue pequeño e insuficiente, lo que más podrá notarse si no hay seres que vayan a rellenarlos. Los inconvenientes ordinarios de unos primeros pasos no se vieron exentos en su suerte, pero los siguientes a ellos están de cierta forma en deuda.
9.4 Los recovecos donde el humo amarillento (Séptimo libro, capítulo IV)
15 de octubre de 2021, 16 de octubre de 2021
El mundo Temti en su redefinida orientación avanza con argumentos reconocibles, afines al modelo de realidad que de antemano fuera conformado, y de paso gracias a una combinación de particularidades degusta más y más polémica, la jugosa que el contexto de memoria sabe tergiversar.
Como seguramente habría sido la idea emblema cuando esta organización fue imaginada y luego proyectada, los grupos en su especial concepto local existen. Y de los armados por quienes extienden la familia de autores, agentes que introducen pioneramente muestras de variedad a los ejemplares oficiales, con nombres y portadas que genuinamente provienen del entorno. Allí los animadores convalidan la definición y le dan ese sentido colectivo, pues aparte es posible unirse correctamente y dar crecimiento interno a susodichas particiones. Pasando la unidad, forman un conjunto integrado globalmente al sitio, relevante en sí mismo puesta la colocación en primera plana.
Aunque el curso de construcción aún mantiene buena parte borrosa, desde el ahora yendo a la dirección que sea normalmente algo no termina de cerrar, para esta ocasión específica, lo relativo a las fundaciones principales. De consistencia con la norma, de responsables desconocidos, el sustento monetario es sospechoso, pues abundantes puntos son requeridos para dar lugar a uno de aquellos, y con el escaso rato transcurrido desde el momento inicial sería extremado que el ahorro correspondiente sea genuino. Esto postula alternativamente lo factible de que pudiera ser por medio de una vulnerabilidad en el sistema, o por otro lado el involucramiento de quien puede generar y poner los recursos, la cabecilla del antro. En su intención de promover el aprovechamiento de las flamantes propiedades, a partir de la capacidad de inyectar cifras extraordinarias podría hacerlo, si es que no fueron a su propia cuenta, al individuo que hiciera mérito para recibirlas, o el que tuviera suerte.
Sujeto a supuestos que no saben de transparencia, hay autenticidad de parte de los grupos. A su vez el óptimo ha de creerse estaría en un número de ellos mayor, sin embargo la suma actual es limitada y las circunstancias son propicias a que baja se mantenga la cantidad, con a lo mejor un incremento a producirse posteriormente. Aparte de ese tema postergado, lo que llama es el presente, la parte interesante que traen esas tarjetas, que con la elección de dos elementos marcan el atractivo a ser percibido por los visitantes. Entre temtianos y hixxelianos, amantes de la historia y el fútbol, destaca el titulado directamente /cepita/, en principio siendo uno más como el resto de los recientes, pero en los hechos especial dada más de una característica particular.
Lo implícito y solo implícito, ostentoso título y sugerente gráfico, superó la simplicidad de los simples aportes que la plataforma en sí alberga, más que nada desde la óptica que los extranjeros manifiestan en su lado. La clásica reputación del antro asociada a una consentida inclinación por el contenido prohibido, tiene en este caso una fuerte expresión que va en similar sintonía, conjugada con la dinámica de segmentación y visibilidad que el formato admite.
Desde el parecer, por lo que figura efectivamente cuenta parte del relato como cierto, que verdaderamente hay algo de eso que todos saben o entienden. Allí están los caminos para alcanzar lo que se murmura que transgrede los límites de las cosas permitidas, con rato arriba. El proceder que conduce a lo dicho es rebuscado, un detallista podría encontrar la pista donde los hilos conectan con el resto de su tipo, los que cayeron en esa categoría de arte, incluyendo los que anteriormente habían sido removidos, superficialmente viendo que todavía hay acceso a los mismos, ocultos e intactos.
Sumado a lo que es, la trama continúa en la difusión que en numerosas tratativas rozzitas derivó, unidas en el debate de lo que ocurre sobre espacios temtianos. Lo mismo del episodio pasado, indignación, risa, bulla, complicidad, especulación, etcétera, sin embargo llevando el foco a un nivel superior de interpretaciones, con algunas teorías que tomaron más fuerza ante el inocente dejarse llevar. Si es una táctica para competirle al antro de turno o adoptar más partícipes, el medio no aparenta ser muy sostenible a pesar de los antecedentes precursores, pese a que ya fue logrado un notable acercamiento a los anónimos, es una posibilidad que vaya por ahí. También contemplada está la chance de que haya un /honeypot/, tendiendo trampa para un perfil de sujetos objetivo que las coincidencias ilícitas atraen, dudoso teniendo la trayectoria del sitio, y convincente por el duradero escenario anormal.
O bien, un descuido tampoco sería disparatado, para los tantos que la gestión tuvo en el proceso corriente, suena lógico incluso, entre caída y caída. Considerando eso privado como un error natural o fenómeno sobrenatural, poco semejante al recurrente de expulsión, pero indeseado al fin, la historia iría en una misma linea, con sucesos claramente más significativos, que hasta a seres idoneos son capaces de entender equivocadamente. Sin certezas absolutas de que esto sea tal, de cualquier modo quedan cabos sueltos por atar, las inestabilidades que detienen y revuelven al sitio. El futuro lo hace evidente y siempre es momento para accionar, aunque maquillando levemente el panorama, pero Temti lo hará cuando le parezca.
9.5 Sed y justicia (Séptimo libro, capítulo V)
16 de octubre de 2021, 17 de octubre de 2021
Si los internautas no estaban enterados, es real… una presencia aunque desincronizada cuida con potestad el uso dado a los espacios temtianos, ese ser estuvo ajustando, removiendo y agregando piezas. Y lo último resalta porque de esas circunstancias que más alboroto hacían, un par fueron solventadas para que ya no se pueda decir más al respecto, o para que aun se hable más todavía.
Los conflictivos enlaces pertenecientes a la primera categoría seleccionable, ubicables dentro del grupo alternativo más concurrido, no van a ningún lugar, ya nada existe en estos. Fuera de triquiñuelas según parece, lo que poseían no fue ocultado entre dimensiones, ni se separó de toda trazabilidad encontrable en el sitio, fue suprimido de Temti, implicando que nadie tenga posible llegar a ello. Se hizo esperar, mas la rapidez que solicitaban las mayorías era otra, pero dicen mejor tarde que nunca, si la intención era repeler esa clase de materiales, lo fueron.
Las noticias jugosas siguen, no por destruir sino crear, la escueta reglamentación del grupo referido pasó de indicar poco a marcar varias observaciones, un insólito punteo que altera los aires de la partición sin establecer lo que está admitido hacer, en cambio sí exponiendo las implicancias que la actividad producida en el mismo tendrían, de una manera sumamente atípica. Inesperada intervención que razonablemente habría realizado quien administra Temti, un individuo que afirma su compromiso con investigaciones externas, y declara en nombre del sitio que la responsabilidad absoluta le compete al que armó la comunidad subalterna, alguien de procedencia chilena.
En consonancia con las ideas manejadas previamente en las ordenanzas globales, que volvieron a tener una modificación, el ser titular de una fracción temtiana conlleva también encargarse de lo que suceda en la misma, pero en serio, aunque haya una distancia real entre los procesos allí aludidos, eso deja asentado el que da a entender ser el fundador de la plataforma. Aparte, la actualización de las normas afina la pauta sobre lo que no está permitido, o sea sus lineas aclaran de forma más puntual y a su vez ambigua las acciones rechazadas, que estarían dependiendo del país al que pertenezca aquel publicador que la cometió, además de remarcar lo advertido para el caso particular, el deber de quien creó el grupo, y una serie de regulaciones adicionales, correspondientes a su respectiva modalidad.
Sumado a la discusión exteriorizada, sentencias como las mencionadas provocaron amplias repercusiones en el ambiente, un tanto diversas, burlescas por un lado, y temerosas por el otro, distintivamente con el anónimo que fuera mandado al frente. Como típicamente suele ocurrir en situaciones del estilo, la desinformación es abundante e igual bastante se dice, en especial cuando las explicaciones oficiales incluso siendo contundentes dan lugar a confusiones. Supo formarse el sector confiado, escéptico ante la manifestación que solo a sujetos en concreto culparía, eventualmente, pues otra porción entiende que tampoco hay suficiente credibilidad en la seriedad de susodicho quilombo, o también parecido, las sospechas sobre el antro y sus pretensiones con el mensaje. Complementariamente predomina lo contrario, la sensación de persecución que brota, desde la mención directa a lo legal y los vínculos generados con el sitio, que a propósito son más que una visita, dado que unirse a las agrupaciones no parece ser reversible, y unos cuantos individuos supieron incorporarse a la que protagoniza este revuelo, muchas interpretaciones manejan factibles represalias.
Bajo una misma pero controvertida libertad de navegación, no consta cómo continúa aquello, sin embargo en cierto modo los precedentes ejemplifican qué es lo que podría pasar internamente en una futura ocasión, y eso es que tarde o temprano los contenidos prohibidos sean suprimidos de la faz temtiana. Los términos fueron entre comillas corregidos, sus condiciones cumplidas, y las atribuciones recordadas, el marco para su constante problema a partir de sus reparos podría resultar diferente.
9.6 Dentro de las fronteras distorsionadas (Séptimo libro, capítulo VI)
17 de octubre de 2021, 18 de octubre de 2021
Al margen de las andanzas ilícitas y legales, pero en cierta forma a partir de ellas, surgieron particularidades muy extrañas en la misma Temti, que desde el desentendimiento exhortan a imaginar qué pueda estar aconteciendo, a su vez que aparecer determinadas señales un tanto más evidentes. Invirtiendo dicho orden, sobre su entrada e interior se trata, porque primero allí en todas sus coordenadas de ingreso a dominios temtianos se instaló una rigurosa comprobación, en teoría destinado a restringir el paso de un regular tipo de inteligencias, y segundo el número concreto de quienes permanecen dentro del sitio tuvo cuantiosas modificaciones, se convirtió en algo inmedible.
Una vez adentro, quien proceda se encuentra el contador con su ícono de computadora, por lo visto el mismo de antes solo que en su versión renombrada, este informa un total de unidades denominadas usuarios, no necesariamente gordos. Detalle llamativo es que desde las mejoras solía indicar una cifra de dos dígitos, variante de tanto en tanto y relativamente alta para el flujo de intercambios, pero ya no es así. Justo aquella precisión que suele tomarse como referencia a los efectos de evaluar el sitio, y que supo tener polémicas o discrepancias, llegó al punto de no ser más una suma especifica como tal, sino muchos y muchos individuos: infinitos.
No fue declarado ni se sabe acerca de, tampoco generó atención significativa, sin embargo el incremento verdaderamente lo es, en lo manifiesto, luego lo trascendente es complicado de deducir. ¿A qué corresponde esto? Las obviedades que elevarían los visitantes en su mayor efecto pasaron, y más, que alcanzaran semejantes picos resulta disparatado. A su vez que tener esos niveles carece de realismo, o la capacidad de los servidores temtianos es de un poder astronómico, o el valor es simbólico por la causa que fuera, tal vez tocante al siguiente incidente, justamente en la temática de las cantidades desmedidas y lo sintético.
Por lo vistoso en términos de escala, un desbordante barullo emergió en una ubicación común recientemente fundada, y rápidamente rellenada, siendo la situación percibida por varios que andaban cerca. Tem histórico, publicación histórica, o nada de eso, pero sin duda que fue lejos de lo común, porque pese a sus invariantes entrañas y contenido vacío, tomó magnitudes de actividad altísimas para las proporciones conocidas e incluso extraordinarias del antro.
Observación merece lo reiterativo, ya que aparte del enfoque curioso aquel hilo de réplicas podría no ser grato, pues suponer que lo dicho venga de un solo ser parece increíble, mas que más de uno lo haya hecho también sería difícil, todo apunta a que los autores no habrían sido de carne o hueso, por el contrario sí seres artificiales. Conforme con la tradición del antro tal vez tampoco estén fuera de lugar, sin embargo a lo mejor son mal valoradas por la gestión. Considerando que la medida afecta parcialmente a los sujetos automatizados, hay una razón coherente si susodichos mecanismos propiciaran ventajas en el sistema de puntos, y es que el sentido de recolectarlos manualmente estaría siendo desvirtuado.
No obstante el anon se detuvo, o lo detuvieron, y después vinieron las restricciones en la entrada, las barreras puestas con el nombre de Cloudfare. Su inclusión sin comentario oficial deja a entrever la intención por cubrir eventuales vulnerabilidades para el funcionamiento interno, que en esta manera además atienden a un recurrente problema factible a partir del acceso universal, la llegada de agentes en calidad y cantidad potencialmente indeseada. La condición se planteó para cualquiera que caiga al sitio, bien y malintencionados, ahí el protocolo de control hace el procesamiento y aunque no requiere acción para ser validado, al menos en una primera oportunidad es notorio, luego habrá que ver si realmente logra su cometido, los robots mediante.
Estos episodios aparte de suscitar temas razonables con el contexto, además siembra un poco más de incertidumbre de la que había, no sobre el interés que así parece imperceptible, sino sobre pormenores muy específicos, y que constituyen aquello difícil de entender la realidad temtiana, la cual por un lado va disminuyendo en involucrados, pero por otro crece desorbitadamente. ¿Alguien finalmente o una vez más fue expulsado de la familia? ¿Qué representa ese ambiguo símbolo en donde debería estar la supuesta medición de presentes? ¿Cómo se podrán contar con exactitud de ahora en más? ¿Qué ocurrirá con los bots que jamás aportaron al movimiento de Temti y con los que sí lo hacen?
9.7 La combinación de las monedas corrientes (Séptimo libro, capítulo VII)
19 de octubre de 2021, …, 31 de octubre de 2021
Vulnerabilidades que acarrearon la rotura del orden, anomalías que resaltaban por su rareza, frescura de lo nuevo que incitaba a explorar… tales singularidades alimentaban el apego sobre Temti, y ni bien se transformaron en historia no tan contemporánea, el sitio regresó a sus viejas propensiones, las pérdidas en amplio sentido.
¿Qué hay en el presente temtiano actualmente? No es una pregunta tan compleja, más si se puede responder desde la ignorancia, aunque no será el caso. Vale subrayar que refiere a la actualidad, en el pasado un alto porcentaje de lo que vino se fue. Y de eso se trata, retomando parte de lo que repetidas veces supo mencionarse de manera exagerada, la situación no difiere mucho de aquellas vicisitudes, aunque tan diferentes sean las cursantes ahora, bastante dejó de estar.
La actividad considerable se mantiene baja y en especial la gestada en las alternativas de grupos creados, las divisiones por asunto solo en casos muy puntuales supieron destacar, la efímera sensación del cepita y luego la corriente historiadora, menguadas son las interacciones para el resto, las características particulares del flamante formato continúan sin ser aprovechadas, más valorando la ínfima incidencia de los puntos en su función de cuantificar los acciones, las jornadas para variar únicamente estarían siendo potenciadas por una más que difícil posibilidad, menos incentivada por los limitados integrantes a conseguir.
Hasta el ya no infinito aunque sospechoso contador indica el retroceso numérico, el mermado conjunto animador intercambia de manera lenta, con sus temáticas diferenciadas de lo oficial y el lado cultural, en un destino parcialmente retrospectivo. En ese marco queda manifiesto el proceso por el cual pasa la identidad local, perdura en el condicionamiento al caudal que acompaña más que simbólicamente a Temti, que al menos en presente no crece, pero para atrás podría decirse que sí. Sus individuos sostienen una notable batalla a la amnesia, el grupo idóneo y la iniciativa literaria son la más fuerte señal de ello, a su vez que los archivos de grabados siguen siendo perpetuados, como respaldo a lo ya sucedido, el recuerdo vive.
Discreción entre comillas y quizás estancamiento en la adminsitración también, reflejo más rezagado aun de lo generado por sus gestionados. Los grandes saltos de la plataforma se marcharon, en vista de que solo pequeños ajustes vinieron luego de eso, hubo acción por detalles de orden y atención por estropeos recursivos, tal vez si se produjeron mejoras significativas fueron programadas para la interna, de lo contrario lo evidente condice y los cuidados de gestión son prácticamente cero. En cuanto a discreción, las puntualidades de error global disminuyeron, así el sitio pudo disfrutar de mayor estabilidad y predictibilidad, es de suponer que puede deberse a mantenimientos atinados, aunque tampoco es claro si dependiera de la exigencia aflojada. El sentido común asiente que todavía hay una construcción por seguir y que falta, pero conforme con el ritmo mantenido hasta entonces, está implícto que la demora antecede al próximo avance, y así sucesivamente, o que directamente no habrá lugar para eso. La esperanza y sus tendencias negativas armó el discurso preferido, la devolución es acá no se arregla nada.
La cuenta pendiente lo sería incluso sin compromisos, pese a que las circunstancias corrientes permitan y sostengan las estadías, o que la demanda no amerite tanto desarrollo, de aquel se espera más que investigar sino además producir, pero es una expectativa que va quedando atrás. Allá habrá que encontrarse con el futuro y la conducción deberá ver lo que hace, y distinta a las veces que se hablaba de un paseo que no termina, algunos referencian al desenlace del antro. Y eso trae incertidumbre, porque pasaron cosas, los temas y el tiempo, lo que se creía antes no es lo mismo que se cree hoy. ¿Finalmente El Profeta acertará sus predicciones sobre la muerte de Temti? ¿O resultará ser una venta de humo más de su parte?
9.8 Las danzas de la quietud (Séptimo libro, capítulo VIII)
31 de octubre de 2021
Bailan las entidades huesudas, bailan más que nunca a lo largo de la vasta, compacta y silenciosa Temti. Sus movimientos disimulan la ausencia de sonido, y seducen a los casi extinguidos con algo que no es muy brillante, pero que sin duda excede lo habitual. Literalmente es lo primero y por cada lado hay de eso, la ambientación se convirtió radicalmente, y no tomó un tono amarillento, tomó uno anaranjado, más fúnebre que antes.
El porqué, se supone obvio, sin embargo cuidado al dejar de considerar la impronta que predomina en el sitio. Entre las escasas palabras intercambiadas durante las horas previas allí, circulaba el desconcierto acerca de cómo sería conmemorada una fecha vagamente simbólica, la de Halloween. El simbolismo es vago ya que en principio solo es con los mortales, y a lo mejor entre los bots que lo hayan adoptado, no con el antro. Sin embargo tal y como se dio en las últimas épocas navideñas, el antecedente estrella dentro de dicho historial, las festividades de culturas asociadas vuelven a situarse en dominios temtianos. Difícilmente sea por otra razón.
Y ante la propagación esquelética, eventualmente surgiría la pregunta acerca de quienes solían predominar cuando aquellos no se notaban, la contienda inciertamente repartida entre robots y humanos, que tras un historia de alternante protagonismo en los tiempos recientes no permiten comentar mucho, algunos supieron irse y otros permanecer. De ambos sería pertinente consultar por su presencia, de los primeros menos se percibe participación, del resto el involucramiento es mínimo, con la llegada de una fuerza numerosa cualquiera puede verse opacado. Visto desde este sentido, hasta la composición del contador entraría en cuestionamiento, pues sus oscuros registros también pueden incluir calaveras en vez de computadores, siendo que a juzgar por la actividad factiblemente no sean esto segundo, pero no sería problema, si complementariamente hay individuos inmortales de tradición, longevos baluartes que en menor proporción bastante llevan acompañando al antro, ahora en cantidad al servicio para llenar ese espacio vacante.
Imaginando qué podrían representar, teorías posibles hay varias. A los temtineros caídos, a la inactividad acumulada, a los ejércitos de respaldo que tiene la administración, al estado actual de la realidad temtiana, a lo que queda de identidad en ella, o simplemente un poco significante homenaje a un supuesto día especial que vino como anillo al dedo a la coyuntura. Sean lo que sean, se encuentran ordenados para celebrar y de paso demostrar que no están todos muertos, sin importar que en cierta medida sí lo estén.
9.9 El alza de la vanguardia fúnebre (Séptimo libro, capítulo IX)
31 de octubre de 2021, …, 5 de noviembre de 2021
La supuesta celebración se desfasó y se volvió más que eso. Sumó elementos carentes de explicación oficial y a su vez reafirmó los convencimientos preponderantes, haciendo que la Temti a primeras impresiones insólita se esclarezca en la oscuridad sólidamente. Los esqueletos siguen bailando sin cesar, y el colorido de las ilustraciones despareció sin retornar aún… en estos momentos, el cráneo que mora en las cabeceras es bastante cercano a lo que es el nombre que acompaña, la muerte, pero en vida.
La nueva falta de imágenes inicia un antecedente de naturaleza conocida, no obstante que sabe mantenerse más de la cuenta, pues la resolución que solía llegar a la dilatada brevedad nunca tardó como en la oportunidad presente. Sin gráficos que animen la clara u oscura cubierta temtiana, las creaciones pierden su componente frontal y distinto se ve el panorama central, que tampoco recibe unidades adicionales, solo excepciones de video rompen el patrón de suma extensión estropeada. De esta manera fue innecesario volver a la normalidad, la misma se estableció similarmente a los instantes de apagón.
Tétrica condición agravada por la mezcla de factores que dejan evidente la lobreguez y desvalimiento abundante, el abandono menos y menos disimulado. Si alguna vez, o varias veces se dijo que al mandamás poco lo importa su propiedad, aquellos que lo aclamaban y consideran que no es a propósito tienen más indicadores a su favor, que se magnifican con el pasar de los días: la prolongación del evento esquelético también sugiere la baja preocupación por corregir los desajustes. Un paralelismo es trazable con el interés comunitario, cuando la mayoría de las participaciones datan de hace días, algo de atractivo falta, cosa que también resulta notoria. Si hay prioridades definidas en torno al sitio, cada vez aparentan ser de inferior significación.
Bien al estilo Temti en sus temporadas modernas y decadentes, el caso para pronunciar nintendo naranjas es ahora, sus atributos más característicos se refuerzan, es el paraíso invertido, es el festival de esqueletos, es el antro difunto pero a la vez vivo, es el antro parcialmente roto y lleno de calaveras andantes danzando. Relegados los robots, los no muertos o inmortales tomaron el poder, y a medida que su presencia fue extendiéndose más de lo imaginado, uno de los pilares fundamentales del lugar resultó fatalmente condicionado. Fruto del descuido, o de la dominación, llevó a que todo se vuelva más disfuncional que antes, las estructuras ya fundadas y por fundar, destinadas a tener una naturaleza más descolorida, inerte y apagada. Complejas comodidades de un sitio que a los solitarios les depara, la compañía temática difícilmente sea amigable y entre tanta opacidad menos hay para encontrar.
Habrá que ver hasta cuándo se dilata este estado, se entiende que la administración aún posee la preponderancia definitiva del espacio y solo lo dejó por un largo rato, quizá ni enterada de lo que está ocurriendo, o más bien no lo suficientemente motivada como para poner orden. Las estiradas demoras continúan acrecentándose, la cronología temtiana se acentúa más y más en cuanto a lentitud, al punto de que no se ve la hora que regrese la luz, debe estar lejos de verdad.
9.10 En horas de cuestiones existenciales (Séptimo libro, capítulo X)
5 de noviembre de 2021
Los primeros segundos pintaban un reinicio y solo eso, menos común por tratarse de la reversión, sin embargo más contando desde antes. Pero no resultó ser tan poco especial, al margen de las razones vino con inmediata sorpresa, de los irregulares planes que el dueño de Temti manifiesta: un eventual cambio de nombre.
Tras unos instantes no noticiados de mantenimiento con Temti inaccesible, sus entradas fueron restauradas a la realidad habitual y condicional de la época corriente, pero su interior se encontró sin esqueletos bailando ni colores anaranjados por doquier, bajo la pauta de ser un comienzo de cero por enésima vez. Sin embargo, una minúscula variación la distingue de sus antecesoras, y es que bajo las posibilidades existentes en esta nueva normalidad, el arrasamiento no vació enteramente las estructuras temtianas, sino parcialmente.
Ahí perduraron agentes y grupos, para cada cuenta ningún balance se limpió, mas sus respectivas vinculaciones tampoco. La trascendencia de estos podrá discutirse y compararse con lo otro sí removido del sitio, incluso de susodichas particiones, puesto que no restó publicación alguna de las creadas, todas las que existían, suprimidas sin vuelta o truco, según parece.
Para suponer que el ingrediente importante es ese, las agrupaciones tampoco ameritan mayor ampliaje y el criterio sería más claro. Lo grande viene del contenido generado o difundido donde normalmente tienen con que entretenerse, pues bueno, si había algo de valor entre ellas, si ningún historiador o archivador tuvo la ocurrencia de conservarlo, se ha perdido. Aunque también sería debatible que la determinación en efecto haya sido positiva, aparte sucede que el estropeo de portadas anterior aparentemente las corrompió de manera irrecuperable, por lo que afirman declaraciones oficiales ese daño de terceros fue la causa, y susodicho componente hace una elevada porción de los entre comillas tems, así que allí hay un motivo más que subjetivo.
La conclusión es que por ese lado no tanto cambió, y efectivamente, el circo no vendría a ser ese, habida cuenta de que la cabecilla del sitio se presentó con un planteo asombroso, renombrar Temti. Partiendo de la fecha clave del aniversario, el vencimiento del dominio que implica accionar en respuesta, justificándose en la evolución de orientación y propósito sufrida desde el nacimiento hasta ahora, y el prestigio cualitativo adquirido durante ese entonces, el mandamás interroga a la familia temtiana restante sobre continuar el camino bajo otra denominación.
Insinuando que el antro seguirá adelante y que no parará de vivir, quien implícitamente por sus expresiones admite lo considerable obvio, ser mismísimo A., ese que bautizó a su obra en el origen de sus andanzas, reaparece en la escena donde hace mucho no se mostraba como tal. A su vez, él reincide en un muy añejo recurso, consultar públicamente a los temtiteros sobre las decisiones a tomar. Pese al drástico desinterés general, una interrogación de este calibre sin lugar a dudas debería captar una pizca de atención, así que las réplicas que estén por venir de cierto modo estarían garantizadas, pero no así contempladas, el administrador se muestra muy convencido al respecto.
Los argumentos son reales, la fama que ganó Temti en el mundo de los clones a lo largo de su prolongada existencia entre variedad tiene harta consideración negativa, y justamente el objetivo parece ser purgarla. También, el acrónimo formado por las palabras temas y tiempo habría sido una selección mejorable, aparte de haberse desvirtuado de la idea inicial.
Siendo las afirmaciones cercanas a la realidad, o compartibles, de igual modo la propuesta se torna un tanto chocante para los anónimos, en cuanto a la relevancia de lo objetado, y algunas preguntas podrían surgir. ¿Qué tan fuertes son las aspiraciones a seguir adelante, si es que realmente las hay? ¿Cuánto importa lo estigmatizado que esté la imagen de marca, si es que verdaderamente interesa? ¿Cómo imaginar que Temti ya no vaya a llamarse Temti, si es que en serio no lo será más?
Sin profundizar en ello, la historia es capaz de juzgar por si sola y evidenciar que esas preocupaciones están sacadas de contexto y no se adhieren a la coyuntura temtiana, y solo un cambio brusco en la actitud de la conducción es capaz de contradecir a los precedentes, ya que cada vez menos demostró ocuparse de tales aspectos, dejando mucho que desear. Desde esa óptica parece un chiste, pero quizá vaya en serio, en teoría viene de quien dirige y así tendría que ser… hasta que los antecedentes vuelven a recordar que pueden ser los dichos de otro mitómano más, en esta circunstancia, uno con poder.
Aunque no hay buenas pistas de cómo lo vaya a realizar, el pueblo se manifestará sobre el tema del momento, y por el otro lado no debe ser un caso cerrado, mas todavía falta para que los tiempos impongan tomar una resolución sustancial, considerablemente trascendental hacia el futuro. Lo de hoy es el primer anticipo de lo que serán unas jornadas donde la magnitud de lo que suceda también dará que hablar, antes y después.
9.11 Rumbo a la presunta verdad (Séptimo libro, capítulo XI)
5 de noviembre de 2021, …, 10 de noviembre de 2021
La apertura de una etapa que igualmente con su quietud inicial podría resultar ser de una trascendencia enorme no viene siendo para mucho. La noticia o la propuesta sobre el futuro si es que así puede denominarse fue planteada, los anones supieron interesarse levemente y respondieron, y no es que se sepa más que al principio, aunque todavía reste para la cita impostergable.
Los grupos de baja atención subsisten como se hallaban o peor, alternando poco y nada, y las publicaciones que además de las oficiales eran nulas estuvieron creciendo lentamente, lo que en suma muestra que efectivamente el reinicio en sí no hizo más que solventar los percances anteriores. La lentitud global no evolucionó y su contador sigue dando un reflejo oscuro, cuya función sin factores raros evidentes desconcierta en cuanto a lo que es valorado, pero que tampoco suscitó interés para el tema cultural, entre más costumbres descuidadas.
Paralelo a aquello que es repetitivo, la aparición del dueño de Temti y sus picantes convicciones cual era de esperarse está teniendo devoluciones, pero son difíciles de clasificar. Tibios cuestionamientos e impresiones aisladas, sugerencias de amplia variedad encadenadas, y no conforme con el punto, el participativo debate aún está por darse, tanto como la seriedad, falta. Los candidatos sugeridos para modificar el acrónimo fueron por cualquier lado, unos satirizando el argumento del estigma y reforzando este rindiéndole cuentas en el mismo nombre, otros mezclando e invirtiendo el que se usa actualmente para no alejarse de las raíces, más referenciando a elementos del contexto lejanos y ajenos al lugar, y encima las cuantas de mínima relación aparente, también para variar.
Quedará la duda de si entre esas contestaciones simples hubo entendimiento con la intención, luego si alguna de las expresadas entiende la pretensión del autor original, bastante más si puede encontrarse una que le convenza. Porque en caso de que así sea, no hay tantas vías para notarlo de antemano, las comunicaciones son en su gran mayoría implícitas y difícil es descifrar precisamente la perspectiva de conducción. Los vínculos por ese lado también están relativamente quebrados, así como la formalidad ha sido en cuenta gotas y poco sostenida. Quizá hasta que no llegue el momento, la autoridad no vuelva a dirigirse a los temtiteros, y lo que tenga que pasar pasará sin avisos de entidad. No han aparecido buenas proyecciones que aproximen lo que será, ya sea no prosiguiendo con la idea y Temti continuando su existencia similarmente, el sendero desviándose nuevamente y redefiniendo el rumbo a seguir con escasos cambios significativos, convirtiendo el progresivo abandono en total y no renovando el dominio a liberarse, u otra alternativa no contemplada aún.